Adiós universidad gratis en Alemania!

Foto: Universidad de Frankfurt

La educación universitaria gratuita, otro de los “mitos” que existen sobre Alemania en el extranjero, parece finalmente llegar a su fin. El Estado Federado de Hessen se sumó hoy día a varios otros estados, como Baden Württemberg, Bavaria y Renania del Norte Westfalia, entre otros, y anunció la implantación de aranceles a partir del semestre de invierno 2007. La medida, si bien era esperada, causó revuelo porque estableció un arancel fijo de 500 euros semestrales (aprox. 640 USD) para todas las carreras. Además, un arancel de 1.500 euros (1900 USD) para todos los alumnos extranjeros que no provengan de la Unión Europea o que no hayan cursado su examen de termino de la educación secundaria en Alemania. Esta última suma también podrá ser aplicada por las casas de estudios superiores a los estudiantes de programas conducentes al título de Master o a aquellas personas que cursan dos estudios paralelamente.
De está forma, el arancel de Hessen donde se encuentran las Universidades de Frankfurt, Darmstadt, Giessen, Marburg y Kassel, se convertiría inmediatamente en el más alto de toda Alemania. Sin embargo, la última palabra aún no está dicha. La constitución del Estado Federado no permite el cobro de aranceles por la educación, pues esta es calificada de gratuita. En todo caso, el Primer Ministro de Hessen, Roland Koch, ya se blindó para el ataque de demandas que se le avecina. Lo más probable es que logré instaurar su nuevo modelo de universidad pagada, tal como lo hizo con las 42,5 horas de trabajo semanales –récord para toda Alemania.
Las asociaciones de estudiantes ya han anunciado movilizaciones. Si bien es cierto el monto es bajo en comparación a otros países, también es cierto que mil euros anuales tampoco son tan poca plata, incluso en Alemania. Esto si se considera que la mayoría de los estudiantes debe mudarse de la casa de sus padres ubicadas en pequeños pueblos para venir a las grandes ciudades, donde el precio de los arriendos no es precisamente bajo. Una pieza más o menos decente en Frankfurt, donde uno no se congela en invierno, no baja de 350 euros mensuales. Y a eso hay que sumarle todos los demás gastos de la vida cotidiana, que siguiendo con el ejemplo de Frankfurt no son de lo más baratos. Todo lo contrario, la ciudad del Euro, los Yuppies y los bancos es casi la más cara de Alemania y al mismo nivel de Munich.
El único aspecto positivo es que los estudiantes deberán apurarse con sus estudios, pues es conocido por todos que los alemanes terminan su pre-grado recién a los 28 años. Sin embargo, estas medidas podrían dejar a muchos fuera de la educación. Sobre todo, si se considera que hace poco un estudio de las Naciones Unidas determinó que Alemania era uno de los países donde la educación recibida por los jóvenes estaba más determinada por la clase socioeconómica de sus padres que en ninguna otra parte del globo. Claro, los hijos de gente de «menores recursos» prácticamente sólo pueden soñar con ir a un liceo (Gymnasium) y menos la gran mayoría de los extranjeros residentes en el país.
Así si alguien estaba pensando venir a estudiar a Alemania el pre-grado tendrá que comenzar a ahorrar o considerar los planes de crédito ofrecidos por los mismos bancos del Estado Federado. Ellos ofrecerán créditos accesibles con tasas de interés que no deberían superar el 6 ó el 8% dependiendo del Estado.
En todo caso ¡Ojo! con las universidades de Berlín. Allí al menos todavía no hay nada determinado sobre aranceles. Además la ciudad es baratísima y el ambiente top (aunque otros agregarían que quizás no aptas para extranjeros de color). Otra posibilidad es hacer como los mismos alemanes, que desde que se implantaron los aranceles en las universidades germanas, acuden en masa a estudiar a Austria. Allí el gobierno tuvo que, incluso, poner cupos límites para alumnos no austriacos, pues los alemanes amenazaban con dejar fuera a los propios nacionales.